martes, 2 de febrero de 2021

"Los Trincavacunas", por Óscar de Caso. "Tienen muy pocos escrúpulos y mucho cinismo cuando afirman sin pudor: es normal porque sobraban vacunas".

        Me he permitido, con perdón, de apropiarme del título del escrito de hoy del programa de La Sexta “El Intermedio”. Así han denominado los guionistas de este gran espacio televisivo a los sinvergüenzas que se dedican a “ROBAR” vacunas contra la Covid. Sí, benditos lectores, no se me solivianten, ni piensen que deliro o exagero, según la RAE, trincar quiere decir robar; y eso es, lisa y furtivamente, lo que han perpetrado estos forajidos.

          Han robado con la naturalidad y el descaro como lo hacían los Señores del Castillo en la Edad Media cuando quitaban de en medio a cualquier molesto disidente; practicaban el derecho de pernada o se les antojaba cualquier veleidoso capricho. 

    A día de hoy, siguen practicándolo de modo parecido: se suben, sin ningún pudor, el sueldo desmesuradamente, y se lo bajan a la oposición de igual manera en estos tiempos tan terribles que padecemos la gente a pie; se “dan el piro” en sus cargos ministeriales en mitad de la lucha contra el virus para robar votos en otros lares o cambian su decisión en asuntos trascendentales para la ciudadanía cada diez minutos.

          Estos bandidos tienen tan somatizado en su hipócrita conciencia el robar vacunas, como aceptar sobornos de empresarios, utilizar su cargo político para más tarde entrar en algún Consejo de Administración privado o aceptar sobre sueldos y tarjetas de crédito negras de su partido. 

    Tienen pocos escrúpulos y toneladas de cinismo cuando, ante unos micrófonos, afirman sin pudor alguno que se inyectaron la dosis, ya que: “es normal, porque sobraban vacunas”.  

          Habrá lectores cándidos o quizá peligrosamente tolerantes que contemplen los desmanes de estos “chorizos” como algo consustancial a la picaresca o tradición española. También hace unos pocos de años el propinarle una ostia a tu compañera por capricho no estaba mal visto. Y eso se está acabando y penando. Creo que ya es hora de renovar por completo el escaparate interior de escrúpulos, de una vez por todas... ¡joder!.

          Tengo esperanza que la Fiscalía General del Estado se interese por los delitos de robo e intentos de homicidio involuntario que han hecho estos fulanos al privarles del uso por derecho de la protección de la vacuna a personas mucho más necesitadas que ellos.

          Desde este acogedor blog, quisiera hacer un llamamiento o petición a los más distinguidos chisposos (que los hay) de entre sus lectores, con el único y cachondo deseo, que aporten, aparte del castigo legislativo correspondiente que conlleva tal delito, otro tipo de pena que les cause divertida vergüenza popular. Aquí lo dejo…

El poema correspondiente al día de hoy lo escribió el señor Mario Benedetti estando en obligado exilio político en 1973-1974; dentro del libro “Poemas de otros”.  Lleno de pacífica nostalgia contenida y describiéndonos en qué estado de desgracia se encuentra su país durante el período de férrea y maldita Dictadura Militar.

          Los signos ortográficos los ha colocado un servidor para una mejor comprensión del poema. Don Mario casi nunca los utilizaba. Para ahorrar paseos al diccionario:

- Paisito = Uruguay

- Verdes y azules = Colores de los uniformes del ejército

- Foja = Hoja de servicios

A instancias de mis amigos cuerdos y cautelosos

que ya no saben si diagnosticarme

prematuro candor o simple chifladura,

abro el expediente de mi optimismo

y uno por uno repaso los datos.


Allá en el paisito quedó mi casa

con mi gente mis libros y mi aire,

desde sus ventanas grandes, conmovedoras,

se ven otras ventanas y otras gentes,

se oye cómo pasa aullando la muerte,

son los mismos aullidos verdes y azules, son

los que acribillaron a mis hermanos.

 

Los cementerios están lejos pero

los hemos acercado con graves excursiones

detrás de primaveras y ataúdes

y de sueños quebrados

y de miradas fijas.

 

Los calabozos están lejos pero

los hemos acercado a nuestro invierno,

sobre un lecho de odios duermen sin pesadillas

muchachos y muchachas que arribaron juntos

a la tortura y a la madurez,

pero hay que aclarar que otras y otros los sueñan

noche a noche en las casas oscuras y a la espera.

 

La gente,

la vulgar y la silvestre,

(no los filatélicos de hectáreas y vaquitas)

va al exilio a cavar despacio su nostalgia,

y en las calles vacías y furiosas

queda apenas uno que otro mendigo

para ver cómo pasa el presidente.

 

En la cola del hambre nadie habla

de fútbol ni de ovnis,

hay que ahorrar argumentos y saliva,

y las criaturas que iban a nacer

regresan con espanto al confort de la nada.

 

Ésta es la absurda foja de mi duro optimismo,

prematuro candor o simple chifladura,

lo cierto es que debajo de estas calamidades

descubro una sencilla descomunal ausencia.

 

Cuando los diez tarados mesiánicos de turno

tratan de congregar la obediente asamblea,

el pueblo no hace quorum,

 

por eso,

porque falta sin aviso

a la convocatoria de los viejos blasfemos,

porque toma partido por la historia

y no tiene vergüenza de sus odios,

por eso, aprendo y dicto mi lección de optimismo

y ocupo mi lugar en la esperanza.

    

 

4 comentarios:

  1. Buenas, soy un "joven", de 44 años sano, guapo, alto fuerte, deportista...
    Ancianos en residencia.
    Personal que trabaja en residencia.
    Sanitarios.
    Mayores de 80.
    Mayores de 65.
    Personas con salud delicada.
    Estudiantes.
    Personas que trabajan con trato al publico.
    Fuerzas de seguridad.
    Funcionarios.
    Políticos.
    Todo tipo de funcionarios.
    Taxistas.
    Camareros.
    Camioneros.
    Cajeras de supermercado.
    Reponedores de supermercado.
    Mascotas de los ya antes mencionados.
    Por que no decirlo, ( ya que me van a dar leña, que me la den con razón), amantes de cualquier personal de los anteriores mencionados.
    Ritmo vertiginoso de vacunación ( ironía: modo con).
    Acabo ya, que la vacuna, ni la espero.
    Un saludo, y cuidarse mucho.

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  2. Chimo tenemos una clase política en general, los cuales si estuvieran en una empresa privada, NO PUBLICA NO, privada creo que ya estarían en la calle por malos trabajadores, pero como en la política actual cabe de todo, pues así nos va y nos ira si no hacemos limpieza atraves de nuestros votos, lo cual va a ser que no y con esto de la vacunas se ha demostrado que son pésimos, aprovechados y que solo miran por ellos y para ellos todo los demás le da igual que les da lo mismo. Pero empezando por el superintendente y acabando por el ultimo concejal del pueblo mas pequeño.

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  3. Crisis del coronavirus
    Sánchez e Iglesias baten récord de gasto en altos cargos y ‘dedazos’ con casi 4 millones de parados
    Sánchez e Iglesias cierran el año con la destrucción de 622.600 empleos y los peores datos de paro desde 2012


    https://okdiario.com/espana/sanchez-iglesias-baten-record-gasto-altos-cargos-dedazos-casi-4-millones-parados-6777544

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  4. Esto es normal ahora en nuestra clase politica.

    Denuncian que Iglesias y Montero usan de niñera a un cargo público de Igualdad por 51.946 euros
    María Teresa Arévalo estuvo cobrando un sueldo del partido hasta que al llegar al Gobierno empezó a cobrar del Ministerio

    https://www.cope.es/actualidad/espana/noticias/ministerio-igualdad-paga-51946-euros-ninera-los-hijos-pablo-iglesias-irene-montero-20210203_1120717

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