El Alcalde volvió a permitir un botellón en Santa Ana el pasado fin de semana con la elevada incidencia de contagios que está teniendo el covid entre los jóvenes.

Los vecinos de los alrededores del Parque de Santa Ana  esperaban que el Alcalde tomara  alguna medida después de haber denunciado las molestias que   ocasionan las fiestas nocturas sin ningún control municipal organizadas de forma expontánea entre los jóvenes, y menos jóvenes, fiesta denominada vulgarmente "botellón".

   Me decía un vecino que "al Alcalde y a su equipo de Gobierno les importa un pito las quejas que les hemos hecho llegar al Ayuntamiento. No están por la labor de escuchar los problemas de los ciudadanos. Es duro aguantar el ruido desde las 1:30 horas hasta las 8 de la mañana. Si continuan con este pasotismo tendremos que ver si en instancias superiores nos hacen más caso".

En algún momento, los vecinos albergaron la esperanza de que por haberlo denunciado la semana anterior, se iba a tomar alguna medida ....¡se equivocaron!. El Alcalde no ha movido un esparto para ver de equilibrar los derechos de unos a divertirse y el de otros al descanso.

     Además de las molestias, permitir, mejor dicho, no oponerse a la realización de un botellón con el espectácular incremento de los contagios por covid que se estan produciendo en todo el ambito Nacional entre los jóvenes de 15 a 40 años es una negligencia por su parte, señor Alcalde.

     Hasta ahora vamos teniendo suerte. No la tiente tanto que podría salirnos  caro que usted se dedique a mirar para otra parte en vez de afrontar el problema.

        Pilar Egea daba a conocer la noticia hace unos días: Caudete contará por primera vez con una Ordenanza que permita regular los “botellones”, así como la venta y el consumo de alcohol en la vía pública.

       Continuaba diciendo que "todos los ciudadanos, organizaciones y asociaciones que así lo consideren, nos pueden hacer llegar sus opiniones y aportaciones al respecto presentándolas hasta el 18 de julio”.

         “Muchos vecinos sienten una enorme irritación por las molestias que el ruido y la suciedad, principalmente, dándose por tanto dos problemas: las molestias para los vecinos y el consumo excesivo de alcohol a edades cada vez más tempranas". Lo de la irritación es cierto, señora Pilar, por el ruido y la suciedad.

   Pretenden con esta Ordenanza  acabar con las molestias que la ocupación del espacio urbano ocasionan al resto de los ciudadanos "cuando se comportan incívica e irresponsablemente, diseñando una fórmula de intervención mediante medidas legales correctoras”.

     Le diré que también se aprobó una Ordenanza para multar a los que permiten que sus mascotas nos llenen de mierda las calles, Ordenanza que no se pone en marcha. 

    Hay otra que regula la construcción en suelo urbano y rústico que tampoco se cumple. Verbigracia: una Almazara en suelo Urbano R-2 y construcciones en rústico sin control por falta de Inspección.

    Y para que la Ordenanza que prohíba los botellones en la calle sea realmente efectiva, primero tiene que haber Policía suficiente para cubrir los turnos todos los fines de semana. Queda usted muy bien anunciando que "por primera vez vamos a tener una  Ordenanza  que prohíba el botellón". 

    También anunciaron. a bombo y platillo, que "por pimera vez tendríamos una Concejalia de Patrimonio".Si no se está respetando el yacimiento de los "Cadalsos" y ha permitido destruir, en parte,el del "El Real", no hemos conseguido nada.

    Poner en marcha una Ordenanza .....es cuestion de tiempo. Hacerla cumplir, como vemos, depende de la voluntad del que gobierna. Y, de momento.... detecto que se busca más el rédito politico y partidista que mejorar la situación.

    Ustedes se han especializado, y muy bien por cierto, en "vender la burra". Pero, una cosa "es predicar y otra muy distinta dar trigo". Seré el primero en alabar que los vecinos puedan descansar en sus viviendas los fines de semana.