Teniendo en cuenta el alto riesgo de contaminación entre los jóvenes es una imprudencia no tomar ninguna medida para impedir "botellones" en el Parque de Santa Ana.

     Desde hace unos cuantos años a los vecinos de los alrededores del Parque de Santa Ana les toca apechugar con los efectos de los botellones que allí se celebran los fines de semana. La fiesta se alarga hasta que se hace casi de día. Dormir y descansar en estas  condiciones ....resulta poco más o menos que una misión imposible.

     Han hablado con el Alcalde y la Concejala de Interior para exponer la situación. Les han llevado escritos de queja para ver que solución tiene este problema: es decir, "conjugar el derecho de los jóvenes a disfrutar y el de los vecinos a descansar los fines de semana".

    La Concejala de Interior les llegó a decir que "como hemos tenido que cerrar las guaridas, en alguna parte tienen que pasar la noche". Esa no es, señora Concejala, la forma de solucionar un problema que los Jueces, si hay denuncias, siempre resuelven a favor del derecho al descando del vecindario. 

Así las cosas, y con estas airadas respuestas, la solución pasa porque estos botellones se celebren un fin de semana  en la puerta del Alcalde y al siguiente en la puerta de la Concejala. No veo otra forma mejor para que los que "se ponen de perfil ante los  problemas del contribuyente".... vayan tomando cartas en el asunto.

    "Cuando llamamos a la Guardía Civil -me contaba uno de los afectados- estos nos dicen que es un problema que tiene que solucionar el Alcalde mandando a la Policia. Cuando los agentes llegan.... los jóvenes se esconden entre los pinos y cuando se han ido vuelven a las andadas". 

     Con solo cinco parejas de Policias, la mayoría de los fines de semana no hay turnos para controlar la calle. El problema lo tiene el Alcalde por no tener efectivos suficientes para atajar este ....y otros problemas. Dice que va a aumentar la plantilla ....pero todavía no se ha publicado las Bases.

    No obstante, y visto lo visto, me ataca la duda de si teniendo suficiente tropa, el Alcalde ordenará que los fines de semana "haya un poco más de control callejero".

    Otra vecina apuntaba que "con este problema, las viviendas se estan depreciando porque.... ¡haber quien es el guapo que va a alquilarlas o comprarlas!".

      Pero, además de las molestias a los vecinos, hay otro problema más grave. Teniendo en cuenta el alto riesgo de contaminación entre los jóvenes, es una imprudencia, señor Alcalde, no tomar ninguna medida para impedir los botellones en el Parque de Santa Ana y en cualquier otro sitio hasta que no se dé por finalizada la pandemia.  De seguir así....estamos a las puertas de la quinta ola.

     Una imprudencia y un riesgo, como se ha demostrado en las fiestas de fin de curso celebradas en Mallorca, que mañana puede afectar a todo un pueblo. Que nos hayan dicho que nos quitemos la mascarilla ...¡no quiere decir que la pandema ha tocado su fin! y haya "barra libre" para celebrar fiestas en la calle que hemos dado en llamarlas "botellones". 

 No. No me gusta este término. Es más acertado "fiestas en la calle sin sujeción a ningún tipo de control ni norma municipal"

     Después de lo ocurrido el pasado fin de semana, a cualquier persona normal le va a preocupar que el señor Alcalde no esté tomando medidas para no causar molestias a los vecinos y evitar jugar con fuego ante los datos que todos los dias nos están dando los medios de comunicación: "los jóvenes, por falta de vacunas y no cumplir las medidas de prevención sanitarias, estan siendo los más afectados por el coronavirus y sus variantes".