Si hace unos días dábamos a conocer
que en la primera sesión celebrada por la Asociación Española de Paleontología tras el nombramiento
de Dª Isabel Rábano como
Presidenta, se trató el importante yacimiento de Caudete, hoy les cuento cómo funciona la investigación de la microfauna hallada
en el yacimiento.
Esta investigación se realiza en la Universidad de Valencia, en el Departamento de Geología, a cargo del paleontólogo y profesor titular D. Francisco Javier Ruiz Sánchez.
Nos desplazamos Antonio Conejero Rodríguez, presidente
de la Asociación Cultural Amigos de la Historia Caudetana, su hijo Samuel, que realizó la carrera de
Física en esta Universidad, Maria Teresa Martínez Díaz, de la directiva de la Asociación, y su
vicepresidente Francisco G. Marco
Sastre, que había concertado
previamente la reunión.
D. Francisco
Javier Ruiz nos
esperaba en su despacho, situado en la tercera planta del edificio de la Facultad de Ciencias Biológicas, en el
Campus de Burjassot. Tras las presentaciones, pasamos al laboratorio
donde se realizan los trabajos de investigación de la microfauna que aparece en este tipo de yacimientos como el de
Caudete.
Desde el Museo de Cuenca irán trayendo el material
a Valencia para
estudiarlo, cuando Castilla-La Mancha conceda los permisos. Buscan dientes de micromamíferos que aporten la edad
del yacimiento y el conocimiento del contexto paleontológico del entorno
medioambiental de la época, analizándolo por niveles geológicos.
Primero humedecen el material para
disgregarlo. Más tarde lo introducen en ácido acético que ataca al carbonato
dejando libre el diente del que se obtiene una cuantiosa información: datación
temporal del yacimiento, conocimiento de las especies... información básica
para determinar el entorno.
Estos dientes minúsculos, que son el DNI del yacimiento, se catalogan y archivan en cajas de plástico transparente que permiten verlos y estudiarlos con el microscopio. En el yacimiento de El Estrecho apareció el diente de una ardilla terrestre, además de hipariones y otros herbívoros, como suidos, cérvidos.... y carroñeros como hiénidos...
Es un tema que
necesitará mucho tiempo. Por ejemplo, no se sabe todavía si en el yacimiento de
Caudete había dos especies diferentes de hipariones, aunque parece ser si pudo
haber de suidos, a falta de la confirmación de los trabajos de investigación
venideros.
Toda esta información que aporta
la microfauna permite
conocer cómo era el paisaje del entorno: una especie de sabana con un clima
tropical semihúmedo y con una estación
seca, donde los animales fueron sorprendidos por una avenida de agua que
sepultó a hipariones y demás animales herbívoros o carroñeros.
Estamos hablando de unos hechos
ocurridos hace más de 7 millones de años, en el Mioceno Superior. D. Francisco
Javier Ruiz es un experto en este tipo de trabajo y de periodo. Nos dio todo
tipo de explicaciones de lo que se hace en el interior del Laboratorio de
la Facultad.
Nos dijo que hace unos años
estudiaron la microfauna hallada en la A-33 a la altura de la planta
termosolar situada en el término de Villena y a escasos metros del
yacimiento aparecido en El
Estrecho de Caudete.
Propuso celebrar charlas o
conferencias en Caudete. Dijo que "además
de mostrar el yacimiento, se conseguiría concienciar a la población de la
importancia que tiene para Caudete este gran hallazgo para que el día de mañana
sean los ciudadanos los que reclamen un Centro de Interpretación o un Museo
bien documentado para su pueblo".
Manifestó que, de programar las
charlas, "se prestaría a
participar y que Dª Isabel Rábano también se implicaría".
Puso como ejemplo lo hallado en Dinópolis (ciudad de Teruel), o en un pequeño pueblo de la misma provincia de Teruel, Rubielos de Mora, con tan solo 635 habitantes que empezó por poco y hoy con su Museo es una referencia en la paleontología.
Esto le supone al pueblo
la presencia de turistas, visitantes....dando
a conocer al mismo tiempo su patrimonio arquitectónico y poniéndolo en el mapa.
También nos habló de la gran
cantidad de restos palontológicos trasladados a Cuenca, sobre todo de caballos
hipariones, en grandes bloques, por lo que los restos están perfectamente
secuenciados, y muy bien conservados en general.
Es decir, los restos fósiles de un
hipparion del yacimiento de El Estrecho, que tenían el tamaño y la
apariencia parecida al de una cebra, no estaban diseminados, lo que pone de
manifiesto -dijo- que no se trató de
una catástrofe muy destructiva a nivel
de fuerza mecánica, sino más bien de verse sorprendidos por la inundación de
una rambla o de un río ante un temporal, lo que acabó con la vida de una gran
cantidad de hipariones que los arrastró con sus aguas. Explicó el profesor que
vivían formando manadas, como lo hacen actualmente los grandes mamíferos de las
llanuras del Serengueti (Tanzania).
Es tal extraordinaria
la cantidad -expuso
el profesor D. Francisco Javier- que llevará muchos años poner en valor todo lo
que se extrajo del yacimiento de el Estrecho". No descartaba, dijo,
la posibilidad de en algún momento continuar investigando el yacimiento en los
taludes de la A-33 sin entorpecer la circulación.
Una visita muy interesante y singular la que tuvimos el martes en el Campus de Burjassot con un profesor implicado en dar a conocer un trabajo que resulta vital para el conocimiento del ambiente y del entorno en que vivían los animales cuyos restos paleontológicos han sido hallados con motivo de los trabajos del trazado de la A-33.
Gracias a la ayuda de estos investigadores, Caudete podría convertirse en
un referente científico en el mundo de la paleontología española y, posiblemente,
de la paleontología internacional del Mioceno Superior.
En el momento de la despedida conocimos al paleontólogo D. Héctor Botella, Director del Máster de las Universidades de Valencia y Alicante, y especialista en ictofauna. Teresa invitó a ambos especialistas a comer unos gazpachos en Caudete a partir de mediados de febrero y ellos aceptaron gustosamente. La paleontología.... no está reñida con la gastronomía.
Les dejo el enlace para que vean lo que han realizado otros pueblos con restos fósiles hallados que bien podría ser algún día una realidad en nuestro querido pueblo:
https://www.dinopolis.com/region-ambarina.html
Ya nos vamos enterando de algo gracias a esta asociación. Si tenemos que esperar que el sueldo que le pagamos al alcalde y toda la tropa que le adula de sus frutos nos podemos morir de asco puro y duro
ResponderEliminarY me pregunto porque tanto misterio y a estos los reciben y les Dan explicaciones...el que quiera saber que tiene que coger cita en la universidad de Valencia???
ResponderEliminarO las va a dar ya el concejal de turno o su alteza real el señor alcaldesico...