Plaza del Carmen: De la remodelación del edificio donde hace 65 años estuvo "La Cervecería" en Alojamientos que llevarán el mismo nombre.

    El nuevo proyecto que lleva entre manos Diego Cuenca, conocido empresario emprendedor local, es interesante y atractivo para la ciudadanía en general y, en particular, para los que vivimos cerca de la Plaza del Carmen: pretende convertir un edificio de viviendas, cerrado desde hace más de dos décadas, en Alojamientos.

Uno de los objetivos es que la planta baja quede diáfana, como estuvo durante muchos años  para convertirla, por segunda vez, en un Salón para la celebración de eventos: conciertos, bodas, reuniones, conferencias, exposiciones...

      Está sacando a la luz unos esbeltos y elegantes pilares de hierro fundido que quedaron ocultos cuando el edificio se rehabilitó convirtiendo en vivienda la planta baja. La gente recuerda que lo que llamaba la atenciónde aquel Salón eran los numerosos pilares con que se había construído el edificio. 

   Tenía el nombre de "La Cervecería" y era, junto con el Casino, uno de los locales públicos de más empaque y de los más populares y atractivos.

Las dos plantas superiores las quiere convertir en alojamientos. Alrededor de media docena. Recuperará el nombre con el que se conocía el Bar de la planta baja: Alojamientos "La Cervecería".

    De estilo clásico, el edificio es de primeros del siglo XX. Consta de tres plantas. Destaca su fachada por la simetría de sus huecos, la forja de los balcones y un singular alero de madera con azulejos policromados con que remataron la cubierta. Magníficamente ejecutado, ha permitido que se haya conservado intacto en los más de 100 años que tiene el edifico. 

En el interior destaca la escalera curva compensada con mampirlanes de madera situada en la segunda crujía comunicando la planta baja y primera..

   Como el constructor del edificio tenía el mote de Gedeón recuerdo que en las Pascuas una de las canciones más populares que cantábamos hacía mendión a este edificio y a su construcor. Decía más o menos asi: "Gedeón ha hecho una casa nueva con ventanes y balcones vaya que te lo digo que te lo digo vaya".

Se bebía cerveza, se jugaga al domino, a las cartas.... En un ricón del salon, parecido a los que hemos visto en las películas del Oeste, había un piano que entre otros, lo tocaba  el Veterinario del pueblo y Luis Gil el Director de la Banda de Música. También era practicante y tenía la clinica en la calle Las Moreras.

    Otros asiduos al local eran los músicos  que amenizaban las veladas  como la Orquesta Casablanca de la que Jaime Benito Gil formaba parte. También actuaban Diego, que tocaba la flauta travesera, Antonio  hermano del Romano con el clarinete, el padre de Paco el Cansino....Muchos músicos actuaban en este emblemático local.

Francisco Solera Bañón, de mote el Pollo, estuvo trabajando de pinche primero y después de camamero en La Cervecería hasta el año 1931 fecha en que lo dejó para montar su propio negocio: Café Bar "El París".

      Su hija Josefa me contaba la anéctota que protagonizó su padre. Salió unas Fiestas a disparar y cuando llegó delante de La Cervecería le falló el pistón. Por error hechó otra carga y del estruendo rompio los cristales de la ventanas que dan a la calle y el dueño, que no llevaba bien que le hiciera la competencia con El París, lo denunció. El Alcalde de entonces, Vicente Azorín, encerró esa noche a Paco en el calabozo.

       En La Cervecería también "se cantaba, actuaban varietes y se organizaban fiestas de miedo", me decía un señor que era asíduo: después de comer jugaban a las cartas y al dominó. 

No había otro sitio en el que se bebiera cerveza -que poco a poco iba desplanzando al vino- que suministraban en barriles de madera. Para refrescarla, la cerveza la hacían pasar por un sepentin al que le ponian hielo. Otra innovación de aquella época fueron los botellines de cerveza.

Este edificio es conocido por el apellido de sus propietarios: Navarro. Eran un hermano, Pedro, y cuatro hermanas: Mª Luisa, Patrocinio, Carmen (que se casó con el factor de la Estación, Guillen) y Amelia. De ahí que se conociera como la casa de las Navarras. 

   Con el tiempo dividieron el inmueble que pasó a ser la mitad propiedad de un Esteve de Villena donde estuvo ubicado más tarde el Banco Madrid. El piso segundo, al que  se accedía por la calle Santa Barbara, lo tuvieron mucho tiempo alquilado a Juanito Arellano.

  Manuel, así se llamaba el hijo del dueño, de mote Manolito (jugador de fútbol en el Frente de Juventudes), fue novio de la hermana de Paco el Trompeta, Joaquina Tecles Arellano. Federico Badenes llevó muchos años el Bar.

     Como vemos, estamos ante un edificio centenario, cargado de historias y anécdotas que lleva más de 25 años sin ser habitado, salvo los dias de Fiesta para presenciar el Ruedo de Banderas, volverá a tener vida. El edificio esta protegigo desde 1996 por las Normas Subsidiarias.

  Esta parte del pueblo está necesitada de negocios que generen actividad y un movimiento que hoy escasea...

La calle Mayor se desarrolló a finales del siglo XIX gracias al extraordinario desarrollo que tuvieron las alcoholeras. Los beneficios de la vid se invirtieron en levantar casas de recio abolengo como esta situada entre la calle Mayor y la Plaza. La filosera acabó con aquel desarrollo urbano. 

    Desde finales de siglo, el pueblo se ha ido desplazando hacia la zona de ensanche, conocida como Plan Parcial Sur I. Desde hace 30 años, la Plaza y la calle Mayor entraron en declive. Los Bancos y demás negocios buscaron calles más  anchas. La puntilla la puso el cierre del Mercado Municipal y el llevarse el Mercadillo de los viernes a otra parte. Nos dejaron huerfanos.

     La reciente remodelación de la Plaza fue un acierto acompañado de la apertura del Restaurante La Notaria y el Morgull. Es de agradecer que este inquieto empresario y emprendedor invierta su tiempo, dineros y esfuerzos en esta parte del pueblo que ya empezaba a agonizar.

    Bienvenidos sean pues los "Alojamientos La Cervecería" que además nos recuerda la historia y mil anécdotas de lo que fue nuestro querido pueblo. Todo parece indicar que la decoración de los Alojamientos rememorará como se vivía entonces.