Bartolomé Antonio Amorós Vinader
(Este es un caso del reconocimiento de un militar caudetano, temido y estudiado en las Academias militares francesas, y más conocido y valorado en Zaragoza que en su patria chica por su valor y arrojo en la defensa de esta ciudad aragonesa contra la invasión Napoleónica.)
Hace un tiempo, cuando hablamos de La Toconera, citamos a D. Enrique Amorós Conejero como uno de los propietarios de tierras en este paraje (personaje muy interesante en el que profundizaremos en el futuro para entender la Historia de Caudete de finales del siglo XVII y XVIII) quien estaba casado con María Alfonsa Vinader natural de Murcia1.
De este matrimonio nace, el 13 de julio de 1752,
D. Bartolomé Antonio Amorós Vinader2, el militar más importante y
reconocido que ha sido hijo del mismo Caudete.
D. Bartolomé inicia su carrera militar en Murcia. Con 16 años consigue el grado de Subteniente del Regimiento Provincial de Murcia, culminando su carrera militar con el grado de Teniente General a los 77 años. Falleció el 3 de enero de 1835 a los 83 años.
Desarrolló una intensa vida militar, participando en numerosas acciones en la guerra contra la Francia de Napoleón (finales del siglo XVIII y principios de XIX). Me centraré de manera resumida en la última parte de su carrera. Con el grado de Brigadier (General de Brigada), marcha con el ejército de Valencia a luchar contra el ejército francés, enfrentándose a ellos en Tudela y Caparrós, teniéndose que retirar a Zaragoza.
Esta ciudad sufrió dos
sitios (asedios) por parte del ejército francés, siendo el segundo el más
feroz, el cual duró desde finales de 1808 hasta el 21 de febrero de 1809.
Al frente del ejército español se encontraba durante el sitio de Zaragoza, D. José Rebolledo de Palafox y Melzi, quien encarga a sus generales la defensa de una extensa tapia que rodeaba la ciudad de Zaragoza. Al Brigadier D. Bartolomé Amorós le asigna la defensa del saliente de Santa Engracia, junto con la Torre del Pino y el reducto del Pilar.
Después de dias de asedio, los franceses toman Santa Engracia y la Torre del Pino, quienes envalentonados por este éxito se lanzan a la toma del reducto del Pilar. Pero pese a todos los inconvenientes, el brigadier Amorós consigue montar una muy efectiva defensa que los franceses no son capaces de superar, dejando el campo cubierto de muertos y heridos.
Esta
acción le supuso al Brigadier Amorós el ascenso a Mariscal de Campo3.
La posición no es tomada por los franceses sino abandonada por los españoles el
16 de enero de 1809 y solo tras obedecer las órdenes de Palafox. Entre los
pocos superviviente un caudetano, D. Bartolomé Amorós Vinader. Tras la
capitulación de la ciudad fue hecho prisionero y trasladado a Francia.
Hay una anécdota que no puedo dejar pasar por alto y que es recogida en la obra “Obelisco Histórico, en honor a los heroicos defensores de Zaragoza” por Sala Valdés y García Sala. En esta obra los autores nos narran como el mariscal francés Jean Lannes, Duque de Montebello, pide que le lleven a su presencia al defensor de Santa Engracia.
El mariscal francés monta en cólera recriminado a Amorós las tácticas empleadas en la defensa del reducto del Pilar y que tantas bajas había causado al ejército francés, amenazándolo con fusilarlo.
Amorós no calla y contesta en perfecto francés “... siento no hayan podido ser mayores”, a lo que Lannes responde; “Llevaros a esa fiera a donde yo no la vea ni lo oiga)5. Logrando huir de Francia vuelve a Caudete, donde empieza otra batalla por el reconocimiento del empleo de mariscal de campo, el cual fue ganado en el campo de batalla.
Esta tarea no fue fácil según las cartas que escribe el Brigadier Amorós desde Caudete a Palafox reclamándole el reconocimiento oficial del empleo que le había concedido Palafox en Zaragoza, se conservan en el Archivo Municipal de Zaragoza, sección archivo General Palafox.
Sería el 5 de julio de 1822 cuando se le reconoció el empleo de mariscal de campo. Recibió muchas condecoraciones a lo largo de su carrera militar, entre las que podemos destacar: la Flor de Lis, la del Sufrimiento por la Patria y la gran cruz de San Hermenegildo en 1826.
El 7 de diciembre de 1829 el rey Fernando VII firma el Real Decreto 6, por el que lo nombra teniente general; remarcar que por encima de este cargo en el ejército solo está el de capitán general, también le declara benemérito de la patria en grado heroico y eminente.
El general Amorós tuvo 7 hijos y gracias a una de ellos, Dña. Antonia Amorós Fernández, podemos identificarlo en Caudete. Antonia se casó con otro militar D. Cosme de Teresa Hinojar (Murcia), quien fue militar con el grado de Coronel.
Dña. Antonia aportaría un gran patrimonio a este matrimonio, pues recordemos que su abuelo Enrique Amorós era gran propietario en Caudete. Entre las propiedades que este tenía podemos citar varios terrenos en la partida de la “Sierra Lacera”, que hoy es la Toconera. Incluso tenía una casa de campo para ganado llamada de “La Lacera” 7, es lógico pensar que este matrimonio construyera la antigua Casa Coronel 8.
De este matrimonio nacen dos hijos, que serían los nietos del general Amorós;
-Cosme de Teresa Amorós
-M.ª Dolores Teresa Amorós. Hace poco tiempo se le puso su nombre al parque de la Calle José Ruiz y Ruiz, es una de las tres personas que dan nombre a la “Fundación Martínez-Teresa y Ruiz”.
Bibliografía.
1-Archivo Parroquial de Santa
Catalina. Libro de Matrimonios numero 2,1862-1744, f 211v.
2-Archivo Parroquial de Santa
Catalina. Libro de Bautismos número 6,1735-1759, f 232v.
3 y 5-Obelisco Histórico, en
honor a los heroicos defensores de Zaragoza, D. Mario de la Sala Valdés y
García Sala 1908, pág 212 y pág 213.
4- Archivo Municipal de Zaragoza,
Archivo General Palafox. Caja 007389 Signatura 24-3/1-37
6-Diccionario Biográfico del
Generalato Español. Reinado de Carlos IV y Fernando VII (1788-1833). Alberto
Martin-Lanuza Martínez, pág 50.
7-Catastro de Ensenada. Libro de
lo Real de seglares de Caudete 10- 4-1761, pág 149.
8- La Casa Coronel que vemos en esta fotografía ya no existe, se construyó a principios del siglo XX sobre otra más antigua.
J.J Gavilan R. (noviembre 2022).
El artículo a título informativo muy bien, permite conocer personajes no conocidos para algunos, pero hay una barbaridad muy grande sin cotejar con ninguna fuente y por lo tanto un poco fruto de la imaginación y del sin sentido:
ResponderEliminar"Incluso tenía una casa de campo para ganado llamada de “La Lacera” 7, es lógico pensar que este matrimonio construyera la antigua Casa Coronel"
Muy bien, por J.J.Gavilan, por enterarnos de cosas de nuestro pueblo que la mayoría de Caudetanos no conoce, y es nuestra historia y no la podemos olvidar, ojalá se publiquen muchos artículos como este , enhorabuena, Jose
ResponderEliminarTremendamente interesante...historia heroica caudetana. Pelos d punta, me ha encantado.
ResponderEliminarExcepcional trabajo Chimo.
ResponderEliminarGracias por dar voz a la memoria y la historia.
Gracias por recordar.
El verbo "recordar" viene del latín "re - cordis" cuyo significado viene a ser "volver a pasar por el corazón".
Nunca viene mal para estos aciagos tiempos de progresismo analfabeto que vivimos.
Madre de Dios, cuanta pedantería tienes, más te valdría simplemente una felicitación al señor que ha escrito el artículo, que mire pon donde no es el señor Joaquín Medina, vuelve a leer el encabezamiento del artículo, figura el nombre.
EliminarMe comunicaba con Chimo no con usted, al que no tengo la desgracia de conocer ni me interesa.
EliminarSe llama lectura comprensiva.
Y lo que usted interprete, como comprenderá, no me importa lo más mínimo anónimo de las 3:57
Qué has ido al colegio de las cuevas
ResponderEliminarPueblo pequeño cuna de mucha gente grande en muchas actividades, poco reconocida por sus paisanos, pero no por ello menos grandes
EliminarFelicidades al autor de este artículo, y por supuesto a ti por hacerlo llegar a los que leemos este blog.
ResponderEliminarChimo borra este comentario ese de las cuevas del colegio no se qué
ResponderEliminarPosiblemente Chimo fue a la misma escuela que los niños de las cuevas
ResponderEliminarSeguramente sus padres no disponían de recursos para llevarle a colegios privados como el anónimo 7:36
Además de ir a la escuela pública , Chimo Medina cuando cogía las vacaciones hacia "cursos de verano" con la catalana la caldereta la escuadra y el tiralíneas replanteando y poniendo ladrillos
ResponderEliminarTambién hacía sus pinitos de levantamientos subiendo vigas del suelo al tablón del andamio y el segundo esfuerzo ya lo dejaba donde irían después las tejas
Por eso sabe tanto
Fueron clases intensivas las que lo formaron para desenvolverse hoy con esta soltura
Benjamin
Lo del apellido Teresa y militar me lleva a relacionar todo eso con El Paso.
ResponderEliminarMe gusta mucho tu publicación
ResponderEliminarEnhorabuena al autor y gracias por darnos a conocer éste tipo de información sobre la historia de nuestro pueblo porque me encantan sus escritos
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