Sí, benditos lectores, las personas que hemos tenido un mínimo de sensatez y mucha solidaridad con nuestros prójimos, somos bastante culpables de que nos encontremos en la sexta ola de esta mortal pandemia.
Hace meses deberíamos haber tenido la obligación de plantarnos en la calle, pancarta en mano, y exigir a este “Gobierno marioneta” de la oligarquía, del Fondo Monetario Internacional, del Banco Central Europeo y de media docena más de mafias económicas, que ponen por delante de nuestra salud sus egoístas consignas económicas y políticas.
Resulta paradójico contemplar en los Informativos que los únicos que se han manifestado han sido los descerebrados
negacionistas. Por lo menos, estos tarados lo tenían claro…
Resulta muy complicado asimilar que, durante estas seis oleadas, los “sultanes de las Comunidades Autónomas” con sus poderosos Tribunales Superiores de Justicia Autónomos y sus arbitrarias y dispares Sentencias autónomas, junto con “los amos de los castillos locales” con su patente permisividad autónoma, hayan permitido este desbarajuste de medidas para contener las rápidas y anunciadas por los sabios propagaciones del virus.
Si en China, con 1.300 millones de
ciudadanos, hubieran tomado las mismas decisiones gubernamentales para contener
el virus como en España, estarían la mitad bajo tierra. Es de agradecer que, por
lo menos, los chinos lo tenían claro…
En lugar de sentirse eternamente agradecidos a los sanitarios y a los científicos por tratar de salvar nuestras vidas, estos gilipollas les dan aún más trabajo del que físicamente pueden soportar.
Haciendo botellones masivos; celebraciones
futbolísticas y festeras desmedidas; se reúnen en numerosos clanes familiares
en torno a una mesa de comida; viajan caprichosamente, tan solo porque les
gusta viajar; llenan los bares porque, al parecer, no saben tomarse un café o
una cerveza en su casa; no se ponen mascarilla porque les molesta..... Estos
cretinos, además de tenerlo también muy claro, lo practican, para desgracia
nuestra, con mucha habilidad y de manera cotidiana…
¿Qué han hecho los políticos? Lo que hacen casi siempre: ocultan datos y mienten con descaro, prestan poca atención a los consejos de los científicos, salvaguardan la economía a la salud de sus ciudadanos, siempre pensando en rebañar votos al adversario y obedeciendo a los poderes fácticos.
En estos últimos años, me estoy
preguntando si estos Gobiernos que nos maltratan con su desacertada gestión,
son malvados o es que los estamos sobrestimando y, en verdad, son tontos de
baba y unos ineptos. Cada vez tengo más claro, que no tienen ni puta idea de
gobernar…
Resultado momentáneo de este funesto trance: algunos llevamos dos años sin poder acariciar a nuestros familiares y amigos queridos sin que nos tiemblen las piernas de incertidumbre; aguantamos estoicamente largas horas de espera en lentas colas interminables en las puertas de los Centros de Salud para poder visitar al médico o tramitar una simple baja laboral....
....Los negocios sufriendo lo que no está escrito; los más fuertes terminarán “cazando moscas” a consecuencia del trastorno mental que están ocasionando las infinitas medidas efímeras, transitorias, locales, arbitrarias y contradictorias con las que nos zarandean a diario estos gobernantes.
Éstos, si son los que desde un principio lo han tenido muy claro… ¡Sálvese quien
pueda!
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