martes, 10 de marzo de 2020

Una costumbre que se celebraba hace más de 70 años: vestirse con trajes de papel la semana después de Fiestas.


    Las tradiciones y costumbres van y vienen. Varían con el tiempo. Desaparecen.... y vuelven a resurgir. No se rigen por una norma fija. Un ejemplo es el desfile de volantes con tajes de papel. Vestirse con "atuendos de papel" ya lo realizaban nuestros antepasados hace más de 70 años.

La semana después de Fiestas se colocaban encima un traje de papel, tanto los mayores como los pequeños. Y lo hacían por calles. Habían pasado las Fiestas y al personal le quedaban todavía ganas de divertirse de forma sencilla, ingeniosa e irónica..... sin charanga, ni desfile ni mascletá. 

     Eso sí: con mucha pericia fabricábamos escopetas y arcabuces a base de cañas que cogíamos en la rambla atándole un hilo a un trozo de caña que, al escurrirse, sonaba como un disparo delante del volante....¡eran otros tiempos!

   Francisco Huesca, que fue Presidente de la Comparsa de Los Guerreros, recordaba el domingo "cómo, con siete años, sus padres lo vestían con un traje de papel la semana después de fiestas".

    Desde hace aproximadamente doce años, la Asociación de Comparsas ha rescatado esta vieja costumbre en la Semana Cultural Festera. Recuerdo que al principio eran muy pocos niños los que salían con trajes de papel y unos cuantos espectadores: sus familiares y pocos más. 

     El domingo ....fue todo un éxito de chiquillos/as con banderas, estandartes, vestidos con trajes de papel, algunos muy bien elaborados, y sobre todo de espectadores. Hacía buen tiempo, lo que favoreció que el personal se tirara a la calle a ver el espectáculo.

    No cabe duda de que haber rescatado esta costumbre es una forma muy ingeniosa de ir introduciendo a los ñiños/as en la Fiesta. El ruedo de banderas que hicieron en la Plaza del Carmen, delante del Estandarte de Los Mirenos, fue espectacular. ¡Nunca lo olvidarán!

La empresa que disparó la mascletá "Pirotecnia del Mediterráneo" es de un caudetano, hijo de Antonio Juan "el Higo" que tenía una empresa de autobuses y vivía el principio de la calle Las Eras. El lunes, el encargado de disparar la mascletá en Valencia, delante del Ayuntamiento, era su hijo. !Enhorabuena por su buen hacer¡






















































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