Unidas por Caudete denuncia que Moisés "carece de un proyecto global y coherente para abordar la protección del Patrimonio".

(A través del siguiente escrito, Unidas por Caudete pone en tela de juicio el interés del Alcalde y su Equipo de Gobierno en la defensa de nuestro cada vez más escaso y deteriorado Patrimonio que basan en tres consignas: "olvido", "propaganda" e "improvisación")

"Dos noticias recientes provocadas por la actuación de nuestro Ayuntamiento vuelven a poner en evidencia la falta de un plan de actuación coherente a la hora de salvaguardar el patrimonio artístico y cultural de Caudete.

Aparecen restos cerámicos de época ibera en unas catas, se realiza un estudio rápido de dos metros cuadrados y se vuele a tapar todo. De inmediato se publicita la actuación como si de algo importante se tratara.

En la misma zona de Santa Ana, el Alcalde o el concejal del ramo deciden que unas pinturas murales están deterioradas y que por lo tanto hay que eliminarlas. Se da la circunstancia de que los grafitis eliminados se realizaron hace unos pocos años a instancias del mismo Ayuntamiento que ahora ha decidido eliminarlas cuando su obligación como institución hubiera sido protegerlas y mantenerlas.

Más allá de las consideraciones legales y de los derechos del autor sobre su obra, queda claro que el actual Equipo de Gobierno se considera autorizado a decidir sobre la marcha qué elementos del patrimonio artístico deben protegerse y cuáles no, por supuesto sin mediar informes técnicos.

Estos dos ejemplos son dos perlas más de un rosario de actuaciones que ponen en evidencia que Moisés López y su equipo carecen de un proyecto global y coherente para abordar la protección del patrimonio.

Ante la ausencia de proyecto la estrategia del Alcalde hasta donde hemos visto se basa en tres consignas: olvido, propaganda e improvisación. Mientras se olvida la torre de Bogarra se publicita una excavación arqueológica en el paraje de Los Capuchinos, muy cerca del lugar en el que una cantera devora yacimientos y pinturas rupestres prehistóricas ante el olvido de los responsables municipales.

Al poco tiempo se olvida la excavación de Los Capuchinos, ya publicitada y se anuncia a bombo y platillo la restauración de un molino centenario que tras años de olvido y abandono acaba de perder su techo.

De repente nuestro Alcalde se fija en el Castillo y encarga una excavación, mucho nos tememos que más allá de la anécdota de unos huesos y una charla en la Casa de la Cultura poco más de sí va a dar esta excavación. No esperamos que se publiquen los resultados por la sencilla razón de que tampoco en su momento se informó al pueblo de cuál era el proyecto.

Lo que salga y nunca mejor dicho. Cuando se olvide lo del Castillo quizás nos anuncien desde la flamante Sala de Prensa que van a poner una valla en la olvidada Torre de Bogarra. Poner una valla para poder olvidarse más tranquilos.

Entre olvidos, propaganda e improvisaciones, el Patrimonio se va deteriorando y cuando ya no quede casi nada que proteger nos dirán que nada ya se puede hacer. O lo borrarán".